VIVE TU VIDA COMO QUIERAS QUE SE RECUERDE, NO COMO QUIERAS QUE SE IMAGINE.

jueves, 29 de abril de 2010

Siempre te recordaré Isamari, siempre lo haré =)

Aquellos que se atrevan a llamar a esto "destino", no es nada personal, pero son idiotas.
¿Qué destino ni que leches? Es que acaso tu te tenias que ir? De veras? Yo no lo creo así. Isamari (gente que te llama Isa, para mi siempre ha sido Isamari, así, todo junto (: ... ) te has ido hoy, te has ido de repente, sin despedirte, sin saludar, sin ningún indicio de tu partida, por lo tanto, no, me niego a llamar esto "destino".

De pequeña yo te veía siempre taaan alta... claro pillina, con tus plataformas extravagantes que te hacían característica! Recuerdo perfectamente cuando yo convencí a mi madre de comprarme una, le dije: "Mira mama, son como las de la Isamari".
Te tengo en mis recuerdos de la infancia, y ahora, aunque con mi tonta adolescencia ya no tuviéramos tanto contacto, era un clásico el encontrarnos todos en el cumpleaños del Daniel, y que fiestas nos metiamos siempre, a nuestra manera, con nuestras risas, siempre, con TU RISA.
Si andaba por la calle y daba la casualidad de que tu estabas en ella, aunque no te viera, te escuchaba reír con alguien, o hablar, hablar mucho! como te gustaba hablar pillina! Y fuera con quien fuera que tuvieras la conversación, siempre tenias esa "magia", ese "don" que te hacía tan especial, el dedicar un simple: "Hola cariño, ¿cómo estás? ¿Y los papas, bien?" acompañado de tu sonrisa, eso, cariño, transmitía alegría al ser más deprimido de la tierra que te puedas encontrar.

Si no nombrara tu pelo aquí, sería todo una blasfemia! Esos rizos anaranjados que te hacían tan característica... cómo me gustaban a mi esos rizos! Estabas llena de vida... siempre, siempre eras tú la que hacía que la gente volviera a ser feliz, de veras.

Yo no creo en Dios, ni en el cielo, ni en nada por el estilo, (qué quieres, he salido rebelde jajaja) y tampoco conozco tus creencias, pero a parte de eso, se que estés donde estés, llamémoslo lugar X, estarás vigilándonos, velando por nosotros como lo hacías cuando estabas aquí.

Ahora mismo estoy muy triste, he llorado y tengo muchas más ganas de llorar, pero sé que tu no quieres verme así, ni a mí ni a nadie, y por eso te aseguro y te doy mi palabra que te recordaré siempre con la mejor de mis sonrisas, esa que hará honor a tu nombre, a todo lo que tu me transmitías, estate segura de ello.



Hasta siempre Isamari, gracias por haber sido una persona tan humana y tan buena (extremadamente buena) en un mundo raro, incoherente, inhumano. GRACIAS (L)

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