Una vez soñé que despertaba en mi cama, rodeada de paredes verdes y preciosas fotos que recuerdan a mi familia, estaba en mi habitación. De repente, algo me faltaba, notaba la ausencia de algo, un susurro quizá, una caricia... no sabia bien bien que era.
De repente reaccioné. Mi madre, faltaba ella entre esa normalidad, mi rutina, faltaba ella entrando y despertándome a las 6.55 avisándome que haría tarde, como siempre. Donde estaba? Me faltaba ella y con ella me faltaba mi mundo, no quería mi habitación si no era con ella. En ese momento deseaba tanto haberle dicho lo mucho que la quería..., y que la quiero! y que siempre la voy a querer, pues siendo mi madre y ella se piensa que en momentos la puedo llegar a odiar, eso no se me esta permitido, mi ley no me lo permite, no puedo odiar a la persona que más se preocupa por mi, sería como odiarme a mi misma.
No te enfades cuando esté odiosa, pues sabes que yo no canalizo bien mis sentimientos, y en casa es el unico lugar donde me siento capaz de expresar todo lo que siento sin... no sé, preocuparme de los demás, porque se que te tengo a ti y al papa. Intentaré ser mejor hija, te lo prometo, lo intentaré todos los días de mi vida, todos.
Te quiero mucho mama, muchísimo, y tu te mereces un día de la madre mejor que el de hoy, te mereces aquello que quieras porque tu, mama, tu eres el modelo de "SuperMujer" que se me viene a la mente siempre, la que puede con todo.
TE QUIERO.
